jueves, 5 de agosto de 2010

I love MARK RYDEN





De niño, los profesores se desconcertaban al ver los autorretratos con un tercer ojo en mitad de la frente o los animales con las vísceras afuera que dibujaba el pequeño Mark Ryden. Gracias a que su familia lo apoyó mucho no sucumbió a la “normalidad” que le exigían sus maestros y además aprendió a disfrutar de la confusión y el susto que provocaba en los profesores. Desde aquellos años Mark Ryden (1963, California) continúa creando universos extraños y perturbadores, donde se mezclan imágenes sacadas de cuentos de niños con iconografía pop, frases en latín, la numerología, elementos de la alquimia, imágenes religiosas, carne y sangre. Mucha sangre. Agarra el mismo universo de los surrealistas, fascinado por el inconsciente colectivo e individual, pero lo dota de una imaginería deliberadamente cargada de connotaciones culturales actuales.
Es así como la trayectoria de Mark Ryden cruza desde la ilustración hasta un manejo eximio del óleo, trabajando tanto en proyectos personales como en carátulas de discos de célebres artistas como los Red Hot Chili Peppers, Ringo Starr y la mega estrella Michael Jackson. Para este último, Ryden diseñó la carátula del álbum Dangerous, una de las más emblemáticas de Jackson y que según algunos entendidos, junto a Sargent Pepper’s de los Beatles, es una de las carátulas más logradas de la historia del pop.

Las creaciones de Ryden inquietan al aparecer, por ejemplo, una niña de rodillas rezando ante una aparición de Barbie, cuadros súper oníricos e infantiles donde los protagonistas son rostros reconocidos como Di Caprio, Cristina Ricci o Björk, conocidos admiradores de Ryden, o niñas que tienen de mascota a Benjamin Franklin. Además está la carne presente en casi todas sus pinturas. Chuletas crudas que sirven de pedestal para conejos o apoyo en general. 
La colección más tétrica y angustiante de Ryden y que de paso le ganó un sitial de honor en el mundo de los góticos, fue “Blood: Pinturas en Miniatura sobre Desolación y Miedo”, una serie de pequeños retratos de niñas que lloraban sangre y guaguas hambrientas ante un plato de sangre y un largo y tremendo etcétera. Aquella colección fue quizás la más íntima de Ryden, la hizo el año en que su esposa le pidió el divorcio y tuvo que dejar de vivir con sus hijos. El día de la inauguración de la exhibición, fue junto el día de su aniversario de matrimonio.

“Es brutal que tus sueños se destruyan y que las esperanzas de tu vida y familia se hagan a un lado, eso causa un dolor muy profundo. Me pareció muy curioso que no hubiese sangre en mi trauma, me parecía que con tanto dolor debería estar bañado en sangre . Quería ser capaz de ver mis heridas pero no estaban en la superficie de mi carne.”

Para el artista:
“la vida es una gran ilusión. Somos criaturas de energía pura y la carne es lo que nos mantiene enteros”



Ryden afirma que intenta alimentar el espíritu con las más diversas fuentes como por ejemplo,
“fotografías de insectos, cuadros del Bosco y Goya, libros acerca de los creadores de circos antiguos, películas de Harryhausen (director de efectos especiales de King Kong), fotos antiguas de gente extraña, libros infantiles de ciencia y del espacio, ilustraciones médicas, música de Frank Sinatra y Debussy, revistas, t.v., Jung y Freud, Ren & Stimpy, Joseph Campbell y Nostradamus, Ken y Barbie, la alquimia, la masonería, el budismo. Por la noche tengo la cabeza tan llena de ideas que no puedo dormir. Las mezclo todas y creo mi doctrina personal sobre la vida y el universo. Para mí, algunas cosas parecen juntarse y hay ciertos paralelos y claves por todo alrededor . Tiene que haber algo de Alicia en el País de las Maravillas que encaje con Charles Darwin… Creo que el mundo esta lleno de cosas increíbles maravillosas. Esto es lo que yo pongo en mis pinturas”.



4 comentarios:

  1. Has despertado mi curiosidad por un artista desconocido para mi. Muchas gracias.

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  2. Me pasa lo que a Pedro, desconocía este ilustrador y buscando más creaciones suyas en el buscador de imagenes veo muchas niñas como de recortables, casi todas con caras tan tristes como la que ha puesto aquí nuestra anfitriona. Lo que si que es cierto es que son imagenes inquietantes. Algo tiene de perturbador.

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  3. Yo en cambio si le conocía. Por cierto, muy bueno el artículo.

    Va a resultar que tienes un lado gótico, como pensé el día que te vi en el concierto de Combichrist.
    :)

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